Para el maya antiguo el mono saraguate fue considerado una divinidad. ¿Cómo fue eso posible? La selva es un territorio hostil para nosotros los seres humanos. Sin embargo, el maya se integró a este mundo en forma admirable. El arte de sobrevivir en la selva lo saben el mono, la serpiente, el jaguar. Ellos y las plantas le enseñaron al maya antiguo a vivir en la selva y ser una cultura creativa. De acuerdo con la Dra. Anabel Ford, quien se ha dedicado a investigar el sitio arqueológico El Pilar, esta relación con la selva no se ha perdido. Las familias mayas que viven hoy en la periferia del sitio aún se refieren a la selva como Otoch Ka’x, “la selva es mi casa”. Yo tengo ilusión de visitar El Pilar.